Sabemos que el tema del olor corporal es inevitable. Hacemos ejercicio, sudamos y transpiramos continuamente, incluso, si no practicamos ejercicio. Muchas personas tienen el olor corporal fuerte a poco que andan diez pasos, y la ducha no es suficiente para alcanzar la limpieza y el olor a limpio en las axilas que deseamos emanar.
El desodorante es nuestro mejor aliado, pero no uno cualquiera, sino uno natural, que incluso podemos hacer nosotras mismas y darle ese toque de olor y textura que sabemos que necesita nuestra piel y, en concreto, nuestras axilas. Y es que, los desodorantes convencionales están repletos de productos químicos como los parabenos, el triclosán y, sobre todo, el siempre presente antitranspirante aluminio.
¿Por qué optar por desodorantes naturales?
Los ingredientes del desodorante tradicional no son buenos para el cuidado del planeta y son muy poco ecológicos, sobre todo en cuanto a la extracción del aluminio o el desprendimiento de los parabenos en ríos, arroyos o mares.
Así que ¿por qué no un desodorante diy? Hacerlo tú misma significa que puedes adaptar la fragancia y usar cien por cien ingredientes naturales, de este modo, solo debes preocuparte por adaptar un poco tus expectativas al comenzar a usarlo, ya que vas a notar que no es lo mismo que un desodorante tradicional al principio.
3 alternativas naturales al desodorante
Si bien, el aluminio es el único ingrediente conocido que bloquea los conductos de sudor, existen otros ingredientes que ayudan a absorber la humedad y enmascarar el olor de las axilas.
1. Desodorante de bicarbonato de sodio
Usar bicarbonato de sodio como desodorante es una forma simple y libre de químicos que ayuda a combatir el mal olor corporal. Se trata de un ingrediente muy común en la cocina, que, además, ayuda a absorber la humedad, pero debe ser usado con precaución, porque usarlo demasiado puede irritar la piel
Para hacerlo en casa debes mezclar 1/8 cucharadita de bicarbonato de sodio con un poco de agua. Sin que se llegue a disolver del todo el bicarbonato en el agua, frota la mezcla directamente en tus axilas.
2. La maicena
La maicena es otro ingrediente natural que absorbe el sudor. Puedes usar bicarbonato y maicena para duplicar el poder de absorción, si mezclas una parte de bicarbonato de sodio con seis partes de maicena, sin agua, y espolvoreas un poco en sus axilas. Añade un poco de limón si quieres un poco de olor cítrico.
3. Limón
Ya que los procesos bacterianos en el sudor son los que causan el olor corporal, muchas personas usan solo unas rodajas de limón y se frotan en las axilas. Y si está recién sacado de la nevera, mejor. Eso sí, no te lo apliques si acabas de depilarte, ya sea con cuchilla o con láser, pues los limones son fototóxicos, y esto hace que la piel sea más susceptible a quemaduras e irritaciones.
4. Alcohol isopropílico
El alcohol isopropílico es otro desodorante muy fácil de aplicar y económico que mata las bacterias que causan el mal olor. LLena un botecito de spray con alcohol isopropílico y rocía tus axilas ¡listo!
Si quieres bueno olor puedes agregar un aceite esencial de tu elección.
5. Desodorante de aceite de coco
El aceite de coco es una de las mejores opciones por su cremosidad y parecido a las desodorantes tradicionales. Se trata de un antibacteriano de textura suave que se derrite cuando se calienta. Y para una mayor efectividad, lo puedes mezclar con bicarbonato de sodio y maicena.
No obstante, es importante probar un tiempo cada uno de ellos para detectar cuál es el que mejor se adecúa a tu piel y con el que más cómoda te sientas.