¿Sabes lo que estás ingiriendo con tu cacao labial? Los petrolatos que puede tener tu barra de labios

Evita los ingredientes tóxicos de la mayoría de los protectores y prepara tu labial natural.

¿Sabes lo que estás ingiriendo con tu cacao labial? Los petrolatos que puede tener tu barra de labios

¿Sabes lo que estás ingiriendo con tu cacao labial? Los petrolatos que puede tener tu barra de labios

Llega el frío y lo primero que solemos hacer es comprarnos un protector labial para llevar siempre con nosotras en el bolsillo y cuidar la delicada y fina piel de nuestros labios. Aunque se conocen como barras de cacao o cacao labial, haciendo honor a su composición original a base de manteca de cacao, lo cierto es que no contienen apenas este ingrediente tan hidratante y emoliente. En su defecto, la mayoría de los bálsamos labiales que se comercializan se preparan con aceites minerales o derivados del petróleo.

Petrolatos más comunes que puede contener tu barra de cacao

Si echas un vistazo al INCI, es decir, al listado de ingredientes que figura en el envase del producto, verás que es probable que figuren entre los primeros Paraffinum liquidumpetrolatum, paraffin, mineral oil. Los petrolatos se utilizan en un sinfín de productos cosméticos, precisamente porque tienen un efecto filmógeno sobre la piel, protegiéndola de las agresiones externas, además de proporcionar un efecto sedoso.

Esto es beneficioso porque protegen a nuestros labios para que no se resientan por el frío y por el viento, pero tiene un gran pero. Producen un efecto oclusivo sobre los poros. La transpiración de la piel es necesaria para eliminar toxinas y regular el intercambio de elementos del interior al exterior. Por ejemplo, absorbe humedad del exterior para aportar hidratación.

El «efecto barrera» es contraproducente

Se ha demostrado que el conocido como «efecto barrera» que ejercen los petrolatos sobre la piel puede llegar a ser contraproducente. Al taponar los poros pueden ayudar a que la piel no sufra por las inclemencias del tiempo, sin embargo, no podrá regenerarse si no aportamos un elemento hidratante.

El hecho de que nuestros labios tengan un aspecto más nutrido cuando aplicamos la barra de cacao convencional, no significa que estén hidratándose. Al contrario, al bloquear el intercambio con el exterior, los labios acaban más resecos. Entonces volvemos a aplicar el labial y así sucesivamente creando un círculo vicioso y de dependencia a los petrolatos.

El peligro de ingerirlos

Sin adentrarnos más en la función que tienen sobre nuestra piel y su efectividad, cabe destacar el estudio realizado por la Organización de Cosumidores y Usuarios (OCU) en el que analizó una muestra de bálsamos del mercado y advirtió que un buen número de ellos contienen substancias tóxicas como MOSH (Mineral Oils Saturated Hydrocarbons) y MOAH (Mineral Oils Aromatic Hydrocarbons). Se trata de impurezas resultantes de un mal refinamiento del aceite mineral que, en ningún caso pueden ingerirse porque pueden alterar el ADN, producir cáncer y acumularse el los tejidos, hígado, bazo o nódulos linfáticos.

La normativa vigente europea sobre regulación de cosmética permite la presencia de estas substancias porque, teóricamente, van a utilizarse únicamente en uso tópico. Sin embargo, gran parte del producto que se aplica sobre los labios se acaba ingiriendo.

La alternativa natural y casera

Elaborar tu propio cacao labial es más fácil de lo que piensas. Puedes hacerlo en la cocina de tu casa siempre y cuando tomes las medidas higiénicas necesarias y desinfectes bien la superficie de trabajo y los utensilios antes de comenzar tu preparación.

Este cacao casero tendrá un «efecto barrera» gracias a la acción de la cera de abeja, pero sin generar oclusión sobre los poros y permitiendo que la piel se hidrate y se repare.

Ingredientes para preparar el cacao labial

Preparación de tu bálsamo labial natural

Funde al baño maría los tres ingredientes. Intenta que sea un proceso suave, a fuego lento, para que los ingredientes no se calienten demasiado y conserven sus propiedades. Una vez se han derretido, puedes verterlos en un recipiente pequeño. Puede ser en una lata de un bálsamo anterior que quieras reciclar, un labial que hayas gastado, incluso un tarrito de vidrio de no más de 20 ml.

Déjalo reposar hasta que se haya solidificado y ya podrás disfrutar de tu cacao labial auténtico, natural y libre de tóxicos.

Fuentes consultadas: La Vanguardia;  https://www.ocu.org/salud/cuidado-piel/informe/protectores-labiales

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