La gran mayoría de las personas están en la búsqueda de una planificación y de una organización que permita que el hogar se mantenga limpio y ordenado, pero no es una tarea sencilla y generalmente se llevan a cabo varios intentos con resultados poco satisfactorios. Es hora de cambiar para mejorar y Marie Kondo ofrece la planificación infalible para que el hogar se mantenga impoluto, ordenado y limpio por siempre.
El plan de limpieza perfecto para el hogar es como la búsqueda de la fuente de la juventud para muchos, una situación que en muchos casos roza en la utopía, pero Marie Kondo ha dado en el clavo y gracias a la aplicación de su método KonMari ha logrado dar con la fórmula que acerca a las personas al éxito de lograr que la casa se mantenga ordenada y limpia, basándose en la constancia y en la plena idea de adherirse a cabalidad al plan establecido.
El plan de Marie Kondo para un orden constate en el hogar
La planificación al momento del orden es una de las premisas fundamentales para cualquier tipo de operación de limpieza y de ordenamiento del hogar, ya sea para los cambios de estación o para funcionar perfectamente en cualquier otro momento del año. Es decir, funciona para mantener el orden y la limpieza de los espacios del hogar durante toda la temporada anual, lo que resulta en un plan perfecto y estratégico gracias a que puede desarrollarse a largo plazo.
Marie Kondo establece que la atención a los detalles cotidianos es primordial y de gran importancia y requiere de la necesaria vigilancia, ya sea para acomodar los cojines de los sofás, doblar las sabanas de la cama o dar una mirada y mantener libre de humedad a la grifería del baño. Resaltando que es un trabajo que debe desarrollarse en equipo y hacerlo con una periodicidad diaria para evitar que las tareas se acumulen y con ellas el desorden.
Marie Kondo basa su éxito en la constancia y la frecuencia
La constancia de las tareas está determinada por la frecuencia con la cual se llevan a cabo las estrategias de orden y limpieza, así que Marie Kondo inicia con las de frecuencia diaria y nada mejor que comenzar todos los días con una correcta ventilación del hogar y una eficiente barrida (más aún si existen mascotas). Para el dormitorio se debe hacer la cama, apenas levantarse de ella y recoger toda la ropa del día anterior, para almacenarla en el sitio destinado para ello.
Perfuma diariamente todas las estancias del hogar, atiende los muebles y ordena la papelería y las revistas, no dejes ningún tipo de utensilios de cocina en el fregadero y presta atención a la humedad, a la nevera y al microondas para mantenerlos impolutos y libres de manchas y restos de alimentos. El baño aséalo tras cada uso y no olvides secarlo para evitar los desagradables olores a humedad y la proliferación de hongos o moho.
Planificando las acciones de orden semanales
Semanalmente, debes ocuparte de cambiar los trapos de la cocina y las toallas de los baños, además de repasar los espejos para evitar manchas y empañamientos y desinfectar los sanitarios en toda su extensión. También es propicia una fregada a todo el suelo de la casa y sacudir el polvo de los muebles. Sin olvidar que se tienen que cambiar las sabanas de los dormitorios, recordando que en época de verano la frecuencia aumenta al menos un par de veces a la semana.
Tareas a desarrollarse quincenalmente
Cada 15 das los objetivos principales de la cocina están delimitados al horno y a la campana, igualmente hay que atender el polvo de las cortinas de toda la casa y de los puntos más altos del hogar como los rincones de las paredes, la parte superior de los estantes y llevar a cabo una aspirada a los colchones y a las almohadas con la firme intención de evitar la acumulación de los molestos y peligrosos ácaros.
Acciones mensuales para ordenar el hogar
Aprovechando el momento de las compras mensuales (hay menos cosas en el hogar) para limpiar y eliminar todo lo que no utilices o que esté caducado. Desde los estantes de los alimentos en la cocina, hasta los materiales de limpieza y los cosméticos o elementos de aseo personal. No te olvides de las ventanas y de la lavadora, ambas son unos perfectos imanes para atrapar la suciedad y los restos de todo tipo de cosas.