Cuando hablamos de peluquería, hay dos tipos de personas: las que disfrutan con visitas quincenales y mensuales a su salón, lo viven como un momento de belleza imprescindible y les gusta cambiar de corte y color, sin importar cuánto cuesten de mantener. Y por otro lado están las personas que no piensan en acudir cada mes a la peluquería, ya sea por falta de interés, de tiempo o de dinero.
Lo que está claro es que tanto cortes como colores requieren de una inversión de tiempo y de dinero, en lo que a visitas al salón se refiere. Pero, ¿realmente todos los colores de pelo son tan difíciles de mantener? ¿No hay una opción de poder teñir tu melena sin tener que invertir muchas horas en la peluquería o tener que visitar cada mes a tu peluquero?
Se lo preguntamos a Rosa Roselló, directora de formación de Druni, y al equipo de estilistas de la cadena de perfumerías para que nos aclaren si podemos teñir nuestra melena sin… tener que invertir miles de horas en el salón de peluquería.
Coloraciones fáciles de mantener
¿Teñirse el pelo requiere tener que invertir en visitas mensuales o quincenales en el salón? Rosa Roselló nos cuenta que no necesariamente: afortunadamente, existen algunos tonos de coloración que no requieren de tanto mantenimiento. Averiguamos cuáles son.
«Los colores que requieren poco mantenimiento son aquellos que se aproximan al color natural de nuestro cabello. Para el cabello castaño intentamos quedarnos en tonos castaños/marrones. En general, se debe intentar quedar lo más parecido posible al color base para no tener que volver al peluquero regularmente (y poderlo hacer en casa)», nos explica la directora de formación de Druni.
En cuanto al tipo de coloración por el que apostar, Rosa lo tiene claro: «lo ideal son los baños de color, generalmente, coloraciones efímeras que se desvanecen con el tiempo y con los repetidos lavados. Pero, a menos que tengas el pelo blanco, el nuevo crecimiento no debería ser evidente. Por tanto, es totalmente posible acudir a la peluquería cada 3 meses para sanearlo», detalla Rosa Roselló, directora de formación de Druni.
Si eres de las que quieren arriesgar un poco más y no limitarte a tener que colorear tu pelo de un tono similar a tu base, el equipo de estilistas de Druni nos da otra opción, por su facilidad de mantenimiento: las mechas balayage o las mechas ombré. Estas mechas degradadas consisten en un aclarado difuminado en la raíz y con un resultado bastante natural.
Es una coloración perfecta que no requiere de una gran inversión de tiempo, ya que las raíces, aunque crezcan, no restan naturalidad al conjunto ni afectan al degradado de las mechas. Con el balayage puedes espaciar las visitas a la peluquería hasta 6 meses, solamente para retocar las mechas.
Eso sí, durante esos seis meses que no acudas a la peluquería deberás tener en cuenta que es importante ir matizando las mechas en casa para evitar los indeseados tonos amarillentos o anaranjados. Puedes hacerlo con mascarillas capilares matizantes, champús violetas o azules para prolongar el tono rubio brillante o productos específicos para mantener el color.
Coloraciones difíciles de mantener
Ahora bien, en caso de que queramos dar un cambio a nuestro look pero permitiéndonos espaciar las visitas a la pelu, también es necesario conocer qué colores conviene evitar para no tener que retocarlos cada quince días o cada mes.
Según nos cuenta Rosa Roselló, «las coloraciones más difíciles de mantener son, sin duda, los rojos y, en general, todos los tonos cobres. De hecho, estos tonos destiñen rápidamente después de lavar el cabello varias veces con champú.
Además, el brillo que los caracteriza es particularmente complicado de mantener si no es en una peluquería, pero no imposible. Con los productos capilares adecuados podrás prolongarlo algo más de tiempo. En definitiva, si no lo mantienes en casa y en el salón, no tiene sentido adoptar este tipo de color».
¿Cómo mantener el color en casa?
Está claro que ahora ya sabes a qué coloraciones puedes optar si no quieres invertir demasiado en visitas a la peluquería. Pero, para lucir tu color impecable mientras no visites al salón, deberás cuidar de tu pelo en casa del mejor modo posible.
En este sentido, los estilistas de Druni nos recomiendan usar «champús específicos para cabellos teñidos, con un pH adaptado al cabello y a la coloración. Esto permitirá que la coloración dure más tiempo y el cabello luzca más brillante y sano. Además, se recomienda evitar los champús con sulfatos ya que arrastran el color más rápido», nos explican.
Y también aclaran: «Por último, reduce, en la medida de lo posible, la frecuencia de lavado con champú y protege el cabello de los rayos UV con aceites o tratamientos especiales. Esto ayuda a mantener la coloración intacta. En cuanto a las mechas, se recomiendan las mascarillas matizantes una vez por semana«.
Ahora que ya sabes que también puedes teñir tu cabello sin necesidad de invertir una fortuna y una gran cantidad de tiempo en la peluquería solo te queda una cosa: elegir ese color de pelo que más vaya contigo.