Los puntos negros pueden ser un problema común de la piel, pero pueden ser evitables. Los puntos negros, esos pequeños y molestos bultos que aparecen en nuestra piel, pueden ser toda una molestia en el rostro o en otras partes de nuestro cuerpo. No sólo afectan nuestra apariencia sino que también generan frustración al intentar lograr una tez clara e, incluso, haernos daño o dejarnos marcas al intentar quitárnoslos.
Porque no es fácil y no salen así como así. La buena noticia es que lidiar con los puntos negros no tiene por qué ser una batalla interminable. Con el enfoque correcto y una rutina constante de cuidado de la piel, puedes combatirlos eficazmente lograr una piel más suave y clara.
Este exfoliante de Neutrogena elimina eficazmente los puntos negros
Los puntos negros, también conocidos como comedones cerrados, son un tipo de lesión de acné que ocurre cuando los folículos pilosos se obstruyen con grasa, células muertas de la piel y otros desechos. A diferencia de los puntos negros, que son comedones abiertos y aparecen oscuros debido a la oxidación, los puntos blancos están cerrados y aparecen como pequeñas protuberancias de color carne o blancas en la superficie de la piel.
Se encuentran comúnmente en la cara, particularmente en la frente, la nariz y el mentón, pero también pueden aparecer en el pecho, la espalda y los hombros. El exceso de producción de sebo: las glándulas sebáceas hiperactivas pueden provocar una producción excesiva de grasa, lo que puede obstruir los folículos pilosos y contribuir a la formación de puntos blancos.
Células muertas de la piel: Los puntos blancos pueden desarrollarse cuando las células muertas de la superficie de la piel se combinan con la grasa y obstruyen los poros. Cambios hormonales: las fluctuaciones en los niveles hormonales, especialmente durante la pubertad , la menstruación o el embarazo, pueden aumentar la producción de sebo y contribuir a la formación de puntos negros.
Productos cosméticos: Ciertos productos de maquillaje y cuidado de la piel que son comedogénicos (obstruyen los poros) pueden contribuir al desarrollo de puntos blancos. Una mala rutina de cuidado de la piel: las rutinas de cuidado de la piel inconsistentes o inadecuadas pueden provocar la acumulación de grasa, suciedad y células muertas de la piel, lo que provoca puntos negros.
Limpia regularmente: limpia suavemente su rostro dos veces al día con un limpiador suave y despúes usa este exfoliante. Esta práctica ayuda a eliminar el exceso de grasa, suciedad y células muertas de la piel que podrían provocar el desarrollo de puntos blancos. Exfolia: la exfoliación regular ayuda a limpiar los poros y eliminar las células muertas de la piel. Considere el uso de exfoliantes químicos como el ácido salicílico o el ácido glicólico, ya que penetran profundamente en los poros y dificultan la formación de puntos blancos.
Evita otros exfoliantes más fuertes: si bien la exfoliación es esencial, evite los exfoliantes físicos fuertes que irritan la piel y empeoran los puntos blancos. Utiliza productos no comedogénicos: opte por productos de maquillaje y cuidado de la piel etiquetados como no comedogénicos o sin aceite para evitar la obstrucción de los poros.
Hidratación: Hidrata tu piel con regularidad, incluso si tienes la piel grasa. Una hidratación adecuada ayuda a mantener la barrera natural de la piel y previene la producción excesiva de grasa.
Manos fuera: Abstente de tocarte la cara con las manos sucias. Tocarse la cara puede transferir grasa, suciedad y bacterias, lo que agrava los puntos blancos. Lleva una dieta saludable: consumir una dieta equilibrada rica en frutas, verduras, cereales integrales y proteínas magras puede promover la salud de la piel y prevenir los brotes.
Mantén el cabello alejado: retírate el cabello hacia atrás y evita que entre en contacto con su cara, ya que los productos y aceites para el cabello pueden contribuir a la formación de puntos blancos. Cambia las fundas de almohada con regularidad: Las fundas de almohada sucias pueden transferir aceite, suciedad y bacterias a la piel. Cambie las fundas de sus almohadas con regularidad para prevenir los puntos blancos.