La pensión de jubilación es una prestación económica que se concede a los trabajadores que han alcanzado la edad legal para dejar de trabajar y que han cotizado un mínimo de 15 años a la Seguridad Social. Sin embargo, no todos los trabajadores cobran la misma pensión de jubilación, ya que esta depende de varios factores, como la base reguladora, el porcentaje aplicable y los años cotizados.
La Seguridad Social establece unos límites mínimos y máximos para las pensiones de jubilación, que se actualizan cada año. En 2023, la pensión mínima está entre los 689,70 euros y los 510,10 euros al mes, mientras que la pensión máxima es de 3.059 euros al mes. Pero, ¿qué hay que hacer para cobrar la pensión máxima? ¿Es posible alcanzarla con al menos 15 años cotizados? ¿Qué opciones hay para mejorar la pensión si no se llega al máximo? En este artículo vamos a responder a estas preguntas y a ofrecer algunos consejos para planificar mejor la jubilación.
Requisitos para cobrar la pensión máxima de jubilación
Como hemos mencionado, la pensión máxima de jubilación es el importe más alto que se puede cobrar al retirarse del trabajo. Para tener derecho a ella, se deben cumplir dos condiciones: haber cotizado por el salario más alto posible durante al menos 25 años y haber cotizado durante al menos 36 años y medio.
La Seguridad Social establece un límite superior al salario sobre el que se puede cotizar, llamado base máxima. En 2023, este límite es de 4.495,50 euros mensuales. Los trabajadores que ganen más de esa cantidad solo pagarán a la Seguridad Social sobre ese límite, y no sobre lo que ganen de más.
Para calcular la pensión, la Seguridad Social suma los salarios de los últimos 25 años y los divide entre 350. Esto da como resultado la base reguladora, que es el importe sobre el que se aplica un porcentaje para determinar la pensión. Si todos los salarios son iguales o superiores al límite máximo, la base reguladora será también el límite máximo. El porcentaje que se aplica depende del tiempo que se haya cotizado.
Además, recuerda que para cobrar el 100% de la base reguladora, se necesita haber cotizado 36 años y medio. Si se ha cotizado menos tiempo, el porcentaje será menor y la pensión también. Por ejemplo, si se ha cotizado 15 años, el porcentaje será del 50% y la pensión será de unos 1.500 euros al mes.
Opciones para mejorar la pensión si no se llega al máximo
Si no se cumplen los requisitos para cobrar la pensión máxima, hay algunas opciones que puedes seguir para mejorar la cuantía de la pensión:
- Seguir trabajando y cotizando más tiempo: Cada año adicional de cotización supone un aumento del porcentaje aplicable sobre la base reguladora. Además, al ampliar el período de cálculo se puede incrementar también la base reguladora si las últimas bases son más altas que las anteriores.
- Aplazar la jubilación más allá de la edad legal: Si se sigue trabajando después de cumplir la edad legal de jubilación, se puede obtener un complemento por demora que aumenta la pensión entre un 2% y un 4% por cada año completo que se retrase el retiro.
- Suscribir un convenio especial con la Seguridad Social: Se trata de un acuerdo voluntario por el que el trabajador se hace cargo de pagar sus propias cotizaciones, con el fin de mantener su derecho a la pensión o mejorar su cuantía. Es una opción interesante para quienes han dejado de trabajar antes de la edad legal de jubilación y quieren completar su carrera de cotización.
- Complementar la pensión con un plan de pensiones o un producto de ahorro: Se trata de instrumentos financieros que permiten ahorrar e invertir a largo plazo para obtener una renta adicional a la pensión pública. Es conveniente informarse bien sobre las características, los riesgos y las ventajas fiscales de cada producto antes de contratarlo.
En conclusión, cobrar una pensión de jubilación de más de 3.000 euros al mes es posible, pero no fácil. Se requiere haber cotizado por la base máxima durante al menos 25 años y haber cotizado al menos 36 años y medio. Si no se cumplen estos requisitos, hay algunas opciones para mejorar la cuantía de la pensión, pero también hay que tener en cuenta los costes y los beneficios de cada una. Lo más recomendable es planificar con tiempo la jubilación y consultar con un asesor especializado para tomar la mejor decisión.