El ahorro es un factor determinante para nuestras finanzas. Nos permite tener una estabilidad financiera, tanto para imprevistos, como para organizar viajes sin necesidad de comprometer nuestra nómina mensual. Cobra especial importancia también para nuestra futura jubilación, ya que es una etapa de nuestra vida en la que vamos a disponer casi por completo de la solvencia económica que nos aporte todo el dinero ahorrado durante nuestra vida. Sin ahorros, nuestras finanzas no pueden ser estables, tendremos deudas, descubiertos en nuestra cuenta bancaria, números rojos, etc. Es imprescindible comenzar a ahorrar desde el momento en el que salimos al mercado laboral, y tener los conocimientos suficientes para poder hacerlo de la mejor manera posible.
Para poder alcanzar la edad adulta teniendo plena consciencia sobre la importancia del ahorro, los expertos aconsejan enseñar lo que significan los ahorros a los niños desde la infancia. Para todos aquellos que ya somos adultos, las claves para ahorrar de forma correcta es tener paciencia, constancia, y tener todas nuestras finanzas en orden. Es decir, conviene llevar un registro sobre nuestros gastos e ingresos mensuales, teniendo clara la cantidad de dinero que destinamos al ahorro. A continuación veremos la cantidad de dinero que es más adecuado tener ahorrado dependiendo de nuestra edad.
Qué cantidad de dinero es necesario ahorrar en cada etapa de nuestra vida
Comenzar a ahorrar debe ser una prioridad desde que entramos en el mundo laboral, que suele ser a partir de los 20 años. De esta manera, los expertos aconsejan que en la primera etapa laboral, que se considera de los 20 a los 25 años, tendremos que destinar un 25% de nuestros ingresos al ahorro. Puede que parezca una tarea casi imposible de llevar a cabo, pero lo cierto es que si aprendemos a gestionar nuestras finanzas de la mejor forma, podremos conseguirlo todos los meses. Habrá que ser constantes y vigilar de cerca la cantidad de dinero que destinamos a gastos, así como ver qué tipo de gastos estamos asumiendo, porque muchos de ellos quizás sean prescindibles.
Debido a la situación económica en la que se encuentra España actualmente: los altos precios de los alquileres, la inflación, etc., para poder ahorrar de esta forma es mejor permanecer en el domicilio familiar dependiendo de la cantidad de ingresos que tengamos. Por ejemplo, si apenas somos mileuristas a esa edad, algo muy común en el mercado laboral actual, para destinar un 25% de nuestros ingresos al ahorro, sería necesario retrasar la salida del hogar familiar hasta obtener mayores ingresos. De lo contrario, resultaría mucho más difícil hacer frente a los gastos necesarios y además ahorrar toda esa cantidad de dinero todos los meses.
Siguiendo este estilo de ahorro y llegados a los 30 años, debemos tener un nivel de ahorro alcanzado. De esta manera, si hemos cumplido con el objetivo de ahorro desde los 20 años, al llegar a los 30 tendremos que haber conseguido ahorrar el equivalente a un sueldo anual completo. Esta cantidad puede variar dependiendo de la cantidad de dinero que hayamos podido destinar al ahorro, pero lo ideal es haber conseguido ahorrar durante esa primera década más de 10.000 euros. Así, siguiendo con este modelo de ahorro alcanzada la edad adulta, se deben llegar a los 35 años con un nivel de ahorro que sea equivalente al salario anual de dos años en total.
Especialmente a partir de los 30 años resulta imprescindible el ahorro, ya que comienza una cuenta atrás inminente para la edad de jubilación. Es el momento de nuestras vidas en el que más comprometidos con el ahorro debemos estar. De esta forma, será un objetivo imprescindible alcanzar los 40 años con el triple de ahorro, a los 45 con el cuádruple, y así sucesivamente. De este modo, al alcanzar la edad óptima de jubilación, tendríamos alrededor de 8 salarios anuales ahorrados durante toda nuestra vida, para disfrutar de la última etapa de la forma más cómoda y despreocupada posible.