La gélidas temperaturas de invierno hacen que tus labios y tu nariz se resientan y se agrieten más de lo normal. Sobre todo, si has pasado (o pasas) por un agudo resfriado, sabes que estas zonas de tu rostro, si no te cuidas bien, se van a ver resentidas más de la cuenta, y te van a durar mucho más sino le prestas la atención que se merecen.
Tus labios van a estar enrojecidos, secos y agrietados, y tu nariz lo mismo, por lo que es importante recurrir a un buen ungüento para sanar rápidamente y para que vuelvan a estar perfectamente hidratados y verte de nuevo bella.
¿Por qué se agrietan los labios y la nariz?
Las narices agrietadas durante y después de un constipado o una gripe ocurre por varias razones. Primero es que estás expuesta a la humedad de forma constante, en forma de secreción nasal, y más en invierno, por lo que se rompe la barrera de la piel y provoca grietas y sequedad. Además, el moqueo causa que nos frotemos y nos limpiemos con frecuencia los tejidos, por lo que al final lo quieras o no causa irritación y hasta inflamación en la piel.
Así que, a parte de mantener una buena higiene de manos puede ayudar a minimizar las posibilidades de resfriarse en primer lugar). Pero hay algunos remedios que puedes usar para calmar una nariz y unos labios irritados usando algunos productos clave que seguro que tienes por casa.
1. Usa ungüentos o bálsamos hidratantes
Los ungüentos y bálsamos crean una barrera protectora con un gran poder de permanencia. El clásico Letiblam es buenísimo y súper hidratante y los puedes usar para rehabilitar rápidamente la piel seca o agrietada. Aplícate varias veces al día y, si puede ser, buscar cacaos con ingredientes (si te gustan) como la avena, la manteca de karité o el aloe vera.
2. Consigue un humidificador
A veces, la solución no solo está en aplicar vaselina sino que también radica en mejorar las condiciones de nuestro entorno. Si hace frío fuera, hay menos humedad en el aire, y esto facilita que la nariz se seque más rápido. De esta forma, se refuerza la barrera de humedad natural de la piel en lugar de eliminarla.
3. Suénate con tejidos suaves
Usa tejidos que te provoquen daños mínimos porque, mientras menos irritación haya en el área, mejor. Trata de sonarte suavemente la nariz con un pañuelo suave, esto parece que no, pero es muy importante.
4. Aplica vaselina
La vaselina es lo mejor que hay. Si no tiene olor mejor. La vaselina pura en la zona es casi el mejor remedio para las grietas ya que protege, refuerza y renueva la piel dañada muy rápidamente, y en el caso de daños mayores como heridas, incluso, sangrado, con la vaselina el proceso de cicatrización es mucho más rápido.
¿Con cuál de estos remedios te quedas tú? En realidad, no hay uno en específico sino que la suna de todos harán que tus labios y nariz se curen muy fácil y rápido. Incluso, si lo sigues al pie de la letra, puede que no notes grandes grietas en ellos.