Este es el método ideal para limpiar sandalias tipo Birkenstock sin maltratarlas

Si tu calzado tiene manchas de sudor en la parte interna de la suela, con agua jabonosa y bicarbonato puedes eliminarlas.

El verano se avecina, y con él, los días de calor, ropa ligera y calzado abierto, y por supuesto, llegó la hora de lucir las sandalias tendencia Birkenstock o Teva ¡Una moda antigua que volvió y no parece irse pronto! No por nada las hemos visto en Sienna Miller, Meghan Markle y hasta en la película de Barbie. Sin embargo, aunque son muy cómodas, sujetan bien el pie y actualmente son reconocidas mundialmente, para nadie es un secreto que pierden totalmente el encanto cuando se ensucian.

Por desgracia, esto nos sucede a todos (sin excepción). Y no, esto no quiere decir que seas poco higiénico, en realidad se debe a las huellas que se forman por el sudor de nuestros pies al caminar, es decir, la responsable es la humedad en sí, no la mugre. La buena noticia es que no tienes que reemplazarlas si aún están en buen estado, la clave está en poner en práctica este método para limpiar sandalias de cuero sin maltratarlas y en pocos pasos. ¡Es más fácil de lo que crees!

Cómo limpiar sandalias sucias paso a paso

Dejar tus sandalias abiertas impecables no es complicado y no necesitas gran cosa. Solo debes conseguir un cepillo (de dientes o de lavar ropa), jabón neutro, un poco de bicarbonato, agua y un trapo limpio. Una vez tengas todo a la mano, estos son los pasos a seguir:metodo limpieza sandalias

  1. Con ayuda de un cepillo seco, retira la suciedad y polvo de la parte inferior de la suela y luego repite el proceso, pero esta vez con el mismo cepillo, pero humedecido con agua jabonosa.
  2. Hecho esto, limpia las correas de las sandalias. Primero hazlo con un paño seco y luego con otro húmedo (preferiblemente de microfibra). Para que sea más fácil y eficiente la limpieza, abre las hebillas o velcros con cuidado.
  3. Si notas manchas, aplica un poco de jabón (si son de cuero, usa uno específico o neutro) y frota con un cepillo de dientes suavemente. Al finalizar, retira todo rastro de espuma con un trapo ligeramente húmedo.
  4. El siguiente paso es limpiar la cara interna de la suela. Lo principal es humedecer la piel con un paño y luego, con una mezcla pastosa de bicarbonato de sodio, un poco de sal y agua, frota con movimientos circulares toda la superficie con un cepillo de dientes. Deja actuar por 30 minutos.
  5. Finalmente, limpia con un paño húmedo para remover el bicarbonato y la mugre reblandecida y deja que seque por completo al aire libre y sin contacto directo al sol ni a una fuente de calor (como la calefacción).
  6. Opcional: En caso de que sea de cuero, deberías hidratarla para evitar que se cuartee y aplicar un poco de algún producto impermeable para prevenir nuevas manchas de humedad.

Nota: Si tus sandalias son de ante o gamuza, una vez se sequen repásalas con un paño seco para ordenar en dirección al pelo y darles brillo.

Siguiendo estos pasos tus sandalias quedarán impecables y libres de manchas oscuras, ¡y no solo eso! Gracias al poder desodorizante del bicarbonato, eliminarás malos olores del material sin necesidad de recurrir a productos caros del mercado.

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