El olfato es uno de los sentidos más sensibles y la limpieza del hogar no puede considerarse completa si existen desagradables olores, cada casa dispone de una asociación entre sus espacios y un característico olor capaz de evocar recuerdos. Marie Kondo establece que una casa que huela bien es un característico sinónimo de limpieza, por lo que ha desarrollado las pautas y los hábitos para combatir y evitar los malos olores.
Conocer el origen de los malos olores es primordial para eliminar la fuente que los genera y como una plena solución en la aportación de buenos aromas para las casas, generando que las estrategias de limpieza y de orden de la experta Marie Kondo incluyan un especial apartado para la correcta y eficiente eliminación de los olores desagradables, pero sobre todo evitarlos antes de que aparezcan.
Marie Kondo ataca el cubo de la basura y promueve la ventilación
Ventilar la casa a diario es primordial para la renovación del aire interior y por supuesto para la eliminación y atenuación de los olores que se hayan acumulado. Abrir puertas y ventanas durante al menos 15 minutos diarios durante cualquier temporada del año es una estrategia para expulsar el aire enrarecido, disipar la humedad y evitar la condensación.
El cubo de la basura de la cocina representa un foco de atención a tener en plena consideración, ya que es una de las fuentes de los desagradables olores del hogar. La recomendación de la japonesa es la de tirar con frecuencia la basura y llevar a cabo lavados periódicos del cubo de la basura y no olvidar cambiar la bolsa interna por lo menos cada par de días.
Atender el suelo a lo Marie Kondo para que no genere olores
Uno de los trucos maestros es el de fregar el suelo para eliminar la posibilidad de producción de malos olores, pero hay que tener cuidado de que el agua de la fregona sea reciente. También se aconseja estar al pendiente de la posible producción de moho por culpa de la humedad y de utilizar agua caliente en los suelos para eliminar de un modo eficiente cualquier olor, bacterias y suciedad que produzcan malos olores.
Gestionando los olores del baño
La zona del baño es considerada como un perfecto foco de producción de malos olores para el hogar, por lo que la ventilación y las frecuentes limpiezas son primordiales y para el baño existen infinidad de trucos disponibles. Uno de ellos es colocar una barra de jabón de mano del aroma preferido en un sitio estratégico para que el aroma se disipe por todo el lugar o utilizar unas gotas de aceite esencial sobre el papel higiénico.
Mantener olores agradables en el armario
Los armarios en muchas ocasiones pueden tener un olor a encerrado o a humedad, el cual además de desagradable es capaz de impregnar los textiles y prendas. Para solucionarlo, Marie Kondo hace especial hincapié en las bolsas aromatizantes, las cuales mantienen frescos aromas como por ejemplo a madera o a lavanda. Otra solución es la de impregnar un trozo de fieltro con unas gotas de aceite esencial y colocarlos a ambos lados del armario.
Un lavavajillas sin olores desagradables
El lavavajillas por su constante contacto con la humedad, grasa y restos de alimentos se convierte en una fuente de olores desagradables tanto para la cocina como para las zonas aledañas a ella. Para solucionar este problema existen los ambientadores de lavavajillas o para una solución más sostenible introducir un limón en el interior del electrodoméstico y siempre estar pendiente de las revisiones del filtro.
Limpieza de toda la casa
Garantizar una perfecta aromatización de la casa al momento de limpiarla es una acción de gran efectividad, puedes iniciar colocando unas gotas del aceite esencial favorito en el filtro del aspirador. En los dormitorios puedes fabricar tu propio ambientador textil, utiliza una botella con spray en la cual colocarás un vaso de agua, una cucharada de bicarbonato y suavizante, para pulverizar las sabanas antes de hacer la cama.
Una mirada mensual al zapatero
El zapatero por lo general es uno de los principales productores de malos olores, de allí que haya que limpiarlo con la necesaria frecuencia para evitar que estos se acumulen. En el mercado existen desodorizantes especiales, pero Marie Kondo recomienda una mezcla de vinagre y bicarbonato, el cual deberá ser utilizado con ayuda de un paño húmedo sobre toda la superficie del zapatero y como agente neutralizador de olores se utilizan unas bolsitas de té.