El período de inflación de estos últimos meses está afectando a muchas familias españolas, sobre todo a aquellas con una situación económica y laboral más desprotegida. A día de hoy, padres y madres de familia están en una situación de búsqueda de empleo de manera activa, pero las buenas noticias tardan en llegar y hay que seguir con la vida pagando facturas y gastos que cada vez ahogan más nuestros bolsillos. Por suerte, el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) puede ayudarnos a sobrellevar todo ello con una prestación que todos querríamos tener cada mes.
Durante estos últimos días, el SEPE ha publicado una nueva ayuda económica que está dando de que hablar a todos aquellos padres y madres de familia que se encuentran una situación de desempleo, pues esta prestación alcanza la cuantiosa cifra de los 1575 euros mensuales, pero para optar a ella es necesario cumplir una serie de condiciones.
La ayuda más generosa y a la vez más exigente a la que podemos optar en situación de desempleo
Tal y como está acordado en los Presupuestos Generales del Estado para el año 2023, una persona en búsqueda activa por desempleo no puede cobrar una mensualidad de paro que ascienda a cifras mayores de los 1.575 euros al mes. Además, de que estas prestaciones no cuentan con pagas extra, por lo que se recibirá prestación en cada mes del año, conformándose en 12 mensualidades.
Sin embargo, como se trata de una prestación contributiva por desempleo, para optar a ser beneficiario de esta ayuda debe de cumplirse un requisito imprescindible como el de haber cotizado en un período mínimo de 360 días en los últimos seis años anteriores a la petición de esta solicitud. Incluso, se podría incrementar su tiempo de cobro de manera progresiva hasta en un máximo de 24 meses en aquellos casos en los que el tiempo de cotización sea mayor.
No obstante, esta prestación no viene determinada por el tiempo de trabajo en tu puesto laboral anterior, ya que esta labor la realiza la base reguladora. A través de ella, el Estado se encarga de hacer una suma de las cotizaciones del trabajador durante los últimos seis meses antes de quedar en desempleo para dirimir en qué rango de prestación se encuentra el solicitante y por cuánto tiempo percibirá esa cifra. Por ello, esta ayuda por desempleo es tan buscada, pero tan difícil de conseguir, pues para ello es necesario cumplir tres requisitos imprescindibles:
Unos requisitos a los que no todos los desempleados pueden acceder
El primero de ellos es el mencionado anteriormente, como es el de haber cotizado al menos 360 días dentro de los seis años anteriores a la solicitud. El segundo, poseer una familia con al menos dos hijos a cargo, ambos menores de 26 años o mayores de esa edad pero con un grado de discapacidad igual o superior al 65%. En caso de contar con una familia monoparental, la cifra por subsidio desciende hasta los 1.400 euros/mes, mientras que si no se cuentan con ningún menor a cargo, la cifra se sitúa en los 1.225 euros.
Por último, durante los últimos seis meses que preceden a la solicitud, se debe de haber cotizado una base de al menos 2.248,12 euros al mes, puesto que durante los primeros seis meses de prestación de subsidio se cobre el 70% de la base reguladora, mientras que una vez pasado ese tiempo, esa base desciende hasta el 60% hasta la finalización de la prestación con un máximo de dos años.