¿Sabes que más del 62% de las personas presenta algún tipo de mancha en la piel? No es de extrañar que las manchas sean uno de los problemas estéticos que más preocupan a hombres y mujeres, ¿cierto?
Las manchas pueden aparecer por muchos factores, como el acné, los cambios hormonales o la toma de ciertos medicamentos. Pero el más común es la exposición al sol excesiva y sin la protección adecuada. Y no se trata de algo banal porque, una vez aparecen, las hiperpigmentaciones son uno de los problemas cutáneos más difíciles de eliminar solo con productos de belleza.
¿La razón? Eliminar manchas requiere de activos que logren despigmentar el exceso de melanina que ha provocado la mancha, lo que requiere una rutina de cuidado de la piel muy rigurosa y constante. La clave está en la constancia y en elegir los productos adecuados: atenuar las manchas es difícil, pero no imposible.
4 principios activos para tratar las manchas
La buena noticia a la hora de tratar manchas es que los principios activos para eliminar y prevenir manchas han evolucionado mucho con los últimos avances en cosmética, lo que se traduce en productos más eficaces.
Sin embargo, la farmacéutica Belén Acero, titular de la Farmacia Avenida de América y especialista en dermofarmacia y nutrición, nos recuerda que la mayoría de manchas por hiperpigmentación, como el melasma, «son crónicas y que, si no tomamos medidas adecuadas, como tomar el sol siempre con protección alta, volverán a aparecer«.
«Ciertos activos como el ácido kójico, la hidroquinona, la niacinamida, el phe-resorcinol, el ácido glicólico, ácido tranexámico, vitamina C, retinol, bakuchiol, etc. pueden ayudarte a reducir las manchas”, adelanta la experta. De su mano, elegimos los cuatro activos más eficaces para difuminar las manchas de manera más rápida y efectiva.
Ácido Kójico
El ácido kójico es un potente agente blanqueante que se ha convertido en uno de los principios activos más presentes en la cosmética despigmentante. Ayuda a aclarar la piel, difuminar manchas, unificar el tono y hasta eliminar pequeñas cicatrices y hasta marcas de acné.
Otro punto a favor del Ácido Kojico es su efecto antioxidante, que contrarresta los daños los radicales libres que pueden causar daño oxidativo a las células de la piel. De esta manera, no solo destaca por su efecto corrector de las manchas, sino que, al actuar como un escudo frente a los radicales libres, también evita la aparición de nuevas hiperpigmentaciones así como de signos de la edad.
Ácido glicólico
Pertenece a la familia de los alfa-hidroxiácidos (AHA) y destaca por la capacidad de estimular la síntesis de colágeno, elastina y ácido hialurónico, al mismo tiempo que ejerce una acción exfoliante que ayuda a despigmentar las manchas oscuras.
Su acción no es solo interesante para difuminar manchas, sino que también devuelve la luminosidad al rostro, mejora la textura, afina los poros y previene el envejecimiento prematuro.
Vitamina C
Se trata del principio activo antioxidante por excelencia: es capaz de neutralizar los radicales libres pero también de despigmentar manchas e iluminar la piel, ya que inhibe la enzima tirosinasa, encargada de convertir la tirosina en melanina, provocando las temidas manchas.
Ácido Tranexámico
El más nuevo de la lista y, por ende, el que está más de tendencia: el ácido tranexámico previene y corrige la hiperpigmentación, incluido el melasma. «Se ha demostrado en varios estudios, que este ácido en concentraciones entre el 2 y el 5% actúa de forma similar a la hidroquinona», explica Belén Acero.
Según la experta, el secreto del ácido tranexámico es que «bloquea la interacción del melanocito con el queratinocito, impidiendo así la transferencia de melanina hacia las capas más externas de la piel”.
Tipos de manchas
A pesar de saber los principios activos más importantes a la hora de tratar las manchas, es crucial elegir el más adecuado para cada tipo de mancha. Y es que no todas las hiperpigmentaciones son iguales ni se tratan de la misma forma.
Las cuatro manchas más comunes que aparecen en el rostro son: melasma, pecas, lentigos e hiperpigmentación postinflamatoria (HPI). El melasma, las pecas y los lentigos pueden deberse al exceso de radiación solar, pero también a un desequilibrio hormonal (por eso son tan comunes durante el embarazo y la menopausia) o a factores hereditarios.
«Por su lado, la hiperpigmentación postinflamatoria se produce después de un proceso inflamatorio, agudo o crónico, como puede ser el acné, la depilación con cera o la irritación tras el uso de retinoides”, nos detalla Belén Acero.
De este modo, como existen diferentes tipos de manchas, aunque todas nos parezcan iguales a simple vista, es importante diferenciarlas con un experto dermatólogo y saber cómo tratar cada una de ellas con el cuidado cosmético más adecuado en cada caso.