La jubilación es una etapa de gran importancia en nuestra vida. Por ello, es crucial haber cotizado lo necesario para acceder a una pensión de jubilación lo más satisfactoria posible, así como haber ahorrado el dinero suficiente a lo largo de nuestra vida. Algo que no todos saben, es que dependiendo de la edad es posible acceder a un convenio especial con el que alargar los años de cotización a pesar de estar desempleado. A continuación te contamos cómo.
Los años cotizados son de especial importancia para tener una jubilación lo más tranquila y digna posible. Aunque cada vez se recortan más las pensiones, cuantos más años cotizados tengamos, más sencillo será acceder a la máxima cantidad de pensión posible. Si estamos desempleados pero nos interesa seguir sumando años cotizados para nuestra jubilación, hay convenios especiales facilitados por la Seguridad Social que nos pueden ser de gran utilidad en este sentido.
¿Cómo se pueden sumar años cotizados a la jubilación si estoy desempleado?
Lo primero que debemos tener en cuenta es que, para poder acceder a la pensión por jubilación que otorga el Estado, es necesario haber cotizado un mínimo de 15 años. Puede que, por circunstancias personales como una enfermedad o incluso algún tipo de lesión física, no sea posible llegar a cumplir este requisito, o no se llegue a superar del todo. Es por ello que existen diversas opciones para completar nuestra pensión de jubilación, ya que de otra manera esta sería demasiado baja.
Una de las principales opciones a tener en cuenta en este sentido, son los convenios especiales. Su función es complementar a la pensión de jubilación que otorga la Seguridad Social. De esta manera, cualquier persona que cumpla con los requisitos estipulados, se encontrará en el derecho de acceder a este convenio, tanto si le falta poco tiempo para su jubilación, como si ya se encuentra en ella. De ser esta última la situación en la que nos encontramos, es importante destacar que no puede pasar más de 1 año antes de que solicitemos la ayuda de dicho convenio.
Como hemos mencionado, es imprescindible cumplir con una serie de requisitos para poder acceder al convenio especial para la jubilación. Entre ellos, destacan aquellos empleados que estén en una baja laboral facilitada por el Régimen de la Seguridad Social que corresponda. También los trabajadores por cuenta ajena con contratos indefinidos.
Autónomos que estén dentro de la Seguridad Social, dados de alta y con una edad superior a los 65 años, que puedan presentar la documentación necesaria con los años totales de cotización efectiva que les permita dejar de cotizar al organismo público. Así como empleados que se encuentren trabajando en más de un sitio a la vez y que finalicen alguna de las actividades realizadas tanto por cuenta ajena como propia.
Entran en estos requisitos los pensionistas que dispongan de una incapacidad permanente total en la profesión que desempeñaban, que tras recibir dicha pensión hubieran trabajado o se les hubiera incluido en alguno de los Regímenes de la Seguridad Social, y por lo tanto estén en una situación similar a las anteriores mencionadas.
En este sentido también se encuentran incluidas todas aquellas personas que se beneficien de una pensión por incapacidad permanente parcial. Pensionistas por incapacidad permanente o por jubilación a quienes les haya sido anulada la pensión por medio de una sentencia. Y en último lugar aquellos empleados que no dispongan de pensión porque la solicitaron al estar de baja y se les fue anulada.
Quiénes pueden suscribirse a este convenio laboral y qué cuotas hay que abonar
Pueden comenzar a acceder a este convenio todos los trabajadores que han experimentado una baja en la Seguridad Social y cuya edad supere los 55 años. Al estar suscrito a este convenio, será necesario que el trabajador abone una cuota regularmente, lo que le va a permitir aumentar su poder adquisitivo una vez alcanzada la edad de jubilación.
Para entrar en el convenio es necesario tener un total de 1.080 días cotizados, siempre y cuando estos se dieran en los 12 años anteriores a experimentar la baja. La finalidad de esta ayuda pública es que cualquier persona que lo necesite pueda continuar cotizando sin necesidad de desempeñar un trabajo, durante un tiempo determinado. La cantidad de dinero que debe abonarse en las cuotas que hemos mencionado, se calculará en función de la base de cotización seleccionada por la persona interesada. Y se le aplicará el tipo de cotización vigente regulado por ley.