¿Te has parado a pensar en el tipo de cepillo que usas para cepillar tu pelo? ¿Sabes que su elección influye no solo en su belleza, sino también en su salud? Y es que, si te tomas tu tiempo en elegir el mejor champú para las necesidades de tu pelo, ¿cómo es que aún no haces lo mismo con tus cepillos?
Según nos asegura la estilista Gema Eguiluz, del salón IN-Viso, el cepillado es tanto o más importante que el resto del cuidado de tu cabello, debido a que, si se hace con las herramientas correctas, aporta múltiples beneficios a la melena. De ahí la importancia de elegir el mejor cepillo para mantener la belleza de tu pelo.
¿Por qué es importante el cepillado del cabello?
En primer lugar, el cepillado activa la micro-circulación del cuero cabelludo, lo que estimula el riego sanguíneo en la zona, haciendo que el bulbo capilar se oxigene más fácilmente y el cabello crezca más rápido.
En segundo lugar, al cepillar siempre en la misma dirección, conseguimos que el pelo quede más brillante y pulido. Y, en tercer lugar, el cepillado aporta también un efecto exfoliante, ya que ayuda a eliminar células muertas, impurezas, restos de productos de fijación y otros residuos que puedan haberse acumulado en el cabello, del mismo modo que también elimina nudos y enredos, reduciendo la rotura.
¿Qué tener en cuenta a la hora de elegir un cepillo para el pelo?
Si hay algo en lo que nos insiste Gema es que, para lograr todos estos beneficios, es importante elegir qué tipo de cepillo y de qué material escoger según las necesidades de cada melena. En el mercado existen varios materiales y cepillos, que se utilizan para desenredar, dar volumen, redondos, cuadrados, de púa fina o gruesa, de madera o de cerdas de jabalí.
Lo primero que debes tener en cuenta es que cada cepillo tiene una función concreta y que no todos sirven para cualquier tipo de cabello. La estilista nos recomienda elegir un cepillo de calidad, a ser posible de materiales nobles, como madera, bambú o de cerdas de jabalí y evitando los que sean metálicos o plásticos, que pueden agravar problemas como la electricidad estática.
Elige tu cepillo o peine según sea el grosor o largo de tu cabello: cuanto más largo, más ancha debe ser la superficie y cuanto más grosor, más anchas tendrán que ser las púas. Estos últimos, de púas gruesas y muy separadas, son perfectos para el cabello ondulado y rizado. Los de púas estrechas son ideales para el cabello fino y menos abundante o para el pelo corto.
Cepillo para desenredar
Para desenredar en cabello mojado o húmedo, son ideales los cepillos tipo Tangle Teezer, de púas flexibles y aptos para todo tipo de cabellos. Sin embargo, para desenredar en cabello seco un cepillo paddle es perfecto para cepillar sin aportar encrespamiento ni romper la fibra capilar.
Cepillo para secar
Los cepillos térmicos son perfectos para distribuir el calor de forma uniforme, facilitando el secado y moldeado, así como reduciendo el tiempo necesario para secar el pelo. Los cepillos térmicos redondos ayudan a dar volumen y forma a las puntas con la ayuda del secador. Los grandes son ideales para el pelo largo, mientras que los pequeños sirven para modelar el cabello corto, alisarlo o darle volumen.
Los cepillos de tipo esqueleto, con las cerdas separadas y una especie de esqueleto que deja pasar el aire, son perfectos para preparar el cabello largo para el secado. También son un buen aliado de las melenas rizadas, ya que ayudan a definir mejor los rizos y que estos queden más elásticos, flexibles y brillantes.
Como ves, la elección de tu cepillo perfecto para el pelo puede influir (y mucho) en la salud de tu melena. Así que la próxima vez que pienses que a tu pelo le pasa algo, además de cambiar tu rutina de cuidado y lavado, mira el cepillo que usas y pregúntate si realmente es el más adecuado para ti.