El verano es el momento de desconexión de muchos. Un momento en el que se aprovecha para descansar del trabajo, tomarse unas vacaciones, disfrutar de tardes en la piscina y con seres queridos en terrazas, etc. A su vez, todos los momentos de ocio suponen un gasto de dinero, mayor o menor dependiendo de la actividad realizada. Algo que puede hacer que nuestras carteras se resientan notablemente.
Con el objetivo de mantener tus finanzas bajo control, a continuación te mostramos una serie de consejos que debes tener en cuenta para no derrochar tu dinero durante el verano. Llegados a este punto es importante entender que no se trata de renunciar a momentos de ocio en estas fechas, sino a saber distinguir entre aquellos que merecen la pena y cuáles pueden perjudicar gravemente nuestro bolsillo.
Cómo mantener tus finanzas bajo control en verano
Uno de los principales errores que cometemos durante el verano, es querer llevar a cabo unas vacaciones comprometiendo nuestra nómina actual. O lo que es lo mismo, sin haber llevado a cabo un correcto ahorro previo durante el año. Y es que lo mejor para nuestra economía, tal y como explican los expertos, es destinar un 10% de nuestro salario al ahorro para las vacaciones. Algo que debe hacerse con antelación y de manera controlada.
Para poder mantener nuestras finanzas bajo control, es necesario crear un presupuesto específico para los meses de verano. Tener claros cuáles van a ser los gastos imprescindibles (alimentación, facturas del hogar, cuidado personal, etc), para poder delimitar la cantidad de dinero que vamos a invertir en los prescindibles (salidas de ocio, un viaje, etc.).
Cada presupuesto es diferente teniendo en cuenta las necesidades de cada persona, su poder adquisitivo, si tiene niños a su cargo o familiares con dependencia, entre otras cosas. Por lo tanto, pueden existir tantos presupuestos como personas hay en el mundo, y ninguno es más acertado que otro, simplemente son diferentes. Lo que a ti te funcione será lo correcto, y no tiene por qué ser igual a lo que le pueda funcionar a una persona cercana a ti. Es importante tener esto claro para evitar caer en comparaciones.
Los fondos de emergencia resultan de gran importancia durante todo el año, pero en verano pueden serlo todavía más. Un fondo de emergencia es un dinero que se destina, como su propio nombre indica, tiene como finalidad cubrir accidentes o imprevistos sin necesidad de tener que acceder a nuestro salario mensual, que ya está destinado a otros fines. Es importante disponer de un fondo de emergencia porque nunca se sabe qué imprevisto podemos experimentar, como la rotura de nuestro vehículo, la sustitución de un electrodoméstico estropeado, etc.
Claves para gestionar las finanzas en verano con éxito
En relación a esto, es muy importante tener un fondo de emergencia para no caer en el uso de minicréditos o préstamos rápidos. Al no disponer de ahorros para emergencias, es muy común en momentos de necesidad pensar en acceder a uno de estos préstamos, pero lo cierto es que es un grave error que es mejor evitar.
Estos préstamos nos ofrecen cantidades determinadas de dinero de forma rápida, pero cuyas condiciones de devolución son bastante abusivas. Los intereses son bastante altos y en caso de demora los cargos también son considerables. Es por ello que resulta mucho más beneficioso para nuestra economía personal disponer de un buen fondo de emergencia.
Otro método para ahorrar dinero, es hacer uso de descuentos y ofertas. Si prestamos atención, existen múltiples ofertas en casi todas las actividades de ocio que podemos practicar. Por ejemplo, existen aplicaciones en el móvil que nos permiten identificar descuentos en restaurantes, cines, etc. Incluso descuentos en vuelos y estancias en hoteles. Normalmente estos pasan desapercibidos, pero lo cierto es que pueden beneficiarnos considerablemente.
Comparar precios también sirve de mucha ayuda para escoger de forma eficiente los destinos de viaje, o los restaurantes en los que es más rentable cenar. Si acudimos directamente a un restaurante, es posible que nos salga más caro que otros que se puedan encontrar en la zona. Al final la clave está en observar y comparar.