Entre los electrodomésticos esenciales a la hora de iniciar un nuevo hogar, la nevera o refrigerador sin lugar a dudas está en los primeros puestos —claro, dependiendo de las prioridades de cada persona—. Sin embargo, aunque es fundamental, no siempre se le da un uso o limpieza adecuada y no se guardan los alimentos correctamente para conservarlos lejos de bacterias y en buen estado por más tiempo.
Aunque es un aparato que funciona a bajas temperaturas y los microorganismos no se reproducen tan rápido como en el calor, no es suficiente como para destruirlos. Por lo tanto, si no se realiza un mantenimiento habitual, la comida se puede estropear. Sigue leyendo y conoce cuáles son los cuidados para prevenir la contaminación de los alimentos en la nevera.
Cosas que debes hacer para evitar que la comida del refrigerador se dañe
Aunque sus cuidados no son tan complicados, va más allá de una simple limpieza esporádica. Es vital también tener en consideración otros aspectos para alargar la vida útil no solo de los comestibles, sino también del aparato. Sigue estas recomendaciones y prevén comida descompuesta:
- Controla la temperatura de la nevera: Para que lo que esté en su interior se conserve por más tiempo fresco, es pertinente verificar que la temperatura sea la ideal. Lo más recomendable es que esté al menos a 4 o 5 grados centígrados. Por este motivo se debe ajustar con cada cambio de estación para adaptarla al invierno o verano.
- No llenes en exceso la nevera: evita apilar demasiados recipientes o abusar del espacio, pues esto genera aumento en la temperatura interna y acelerará la descomposición.
- Guarda la comida en su sitio: Hay zonas idóneas para cada alimento, por ejemplo, las carnes en general en la parte más cercana al motor, la comida a recalentar en la parte superior, los huevos, salsas, aderezos y mermeladas en la puerta, los lácteos en la balda del medio.
- No introduzcas comida muy caliente: Este es un error muy frecuente, y aunque parece inofensivo, aumenta el riesgo de proliferación de bacterias.
- No dejes que pase mucho tiempo: La nevera no es un congelador, por lo que no es recomendable dejar los alimentos más de cuatro o cinco días como máximo. Si ocurre lo contrario y se estropea comida, frutas o verduras sin darte cuenta, puede contaminar lo que tiene más cerca.
- Limpia correctamente: Si se ha derramado un líquido (leche, jugo, sopa o salsas), es importante que lo limpies de inmediato, no solo para prevenir suciedad, sino también para que no crezcan microorganismos nocivos y hongos dentro.
Una buena alternativa para limpiar la nevera de forma ecológica y eficaz y evitar la contaminación alimentaria, es el vinagre y el bicarbonato (juntos o por separado). Son buenos antisépticos, antibacterianos y ayudan a neutralizar olores molestos. ¡Prueba estos consejos y prevén dolores de cabeza!