La incapacidad permanente es una situación en la que un trabajador no puede realizar su trabajo debido a una enfermedad o discapacidad. En España, existen diferentes grados de incapacidad permanente otorgados por la Seguridad Social, desde el parcial hasta el total. Es importante que los trabajadores comprendan qué enfermedades se consideran incapacitantes y cómo esto puede afectar su vida laboral.
En el año 2023, se espera que la lista de enfermedades que dan derecho a la incapacidad permanente en España incluya enfermedades como la esclerosis múltiple, el cáncer, la enfermedad renal crónica, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y la enfermedad de Alzheimer, entre otras. En este artículo, te explicamos cuáles son las enfermedades más habituales que pueden dar lugar a una incapacidad permanente en 2023 y qué requisitos debes cumplir para solicitarla.
¿Qué tipos de incapacidad permanente existen?
Para determinar la incapacidad permanente por enfermedad, se realiza una evaluación médica para determinar el grado de discapacidad del trabajador. El grado de discapacidad se determina en función de la afectación que la enfermedad tiene sobre la capacidad del trabajador para realizar su trabajo. Si el trabajador es declarado incapacitado, recibirá una pensión para compensar su pérdida de ingresos. Según el grado de limitación que provoque la enfermedad o el accidente, la Seguridad Social reconoce cuatro tipos de incapacidad permanente:
- Incapacidad permanente parcial: es aquella que ocasiona al trabajador una disminución no inferior al 33% en el rendimiento para su profesión habitual, pero sin impedirle realizar las tareas fundamentales de la misma.
- Incapacidad permanente total: es aquella que inhabilita al trabajador para desempeñar todas o las fundamentales tareas de su profesión habitual, pero puede dedicarse a otra distinta.
- Incapacidad permanente absoluta: es aquella que inhabilita al trabajador para toda profesión u oficio. El trabajador tiene derecho a percibir una pensión mensual equivalente al 100% de la base reguladora.
- Gran invalidez: es aquella situación del trabajador afectado de incapacidad permanente y que, por consecuencia de pérdidas anatómicas o funcionales, necesita la asistencia de otra persona para los actos más esenciales de la vida, como vestirse, desplazarse, comer o asearse.
¿Qué enfermedades pueden dar lugar a una incapacidad permanente?
No existe una lista oficial de enfermedades que den derecho a una incapacidad permanente, ya que cada caso se valora individualmente según el grado de afectación, las secuelas, el tratamiento, la evolución y la profesión del trabajador. Sin embargo, hay algunas patologías que suelen ser motivo frecuente de concesión de esta prestación, siempre y cuando se cumplan los requisitos legales y médicos establecidos.
Entre las enfermedades más habituales que pueden dar lugar a una incapacidad permanente se encuentran las siguientes:
- Trastornos mentales: como la depresión, la ansiedad, el trastorno bipolar o el trastorno límite de la personalidad.
- Enfermedades neurológicas: como el alzhéimer, el párkinson, la esclerosis múltiple, la epilepsia o el síndrome de Ménière.
- Enfermedades reumáticas: como la artritis reumatoide, la artrosis, la fibromialgia o el lupus eritematoso sistémico.
- Enfermedades cardiovasculares: como la cardiopatía isquémica, la insuficiencia cardíaca, la hipertensión arterial o la arritmia cardíaca.
- Enfermedades respiratorias: como el asma bronquial, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), la fibrosis quística o la apnea del sueño.
- Enfermedades digestivas: como la enfermedad de Crohn, la colitis ulcerosa, la hepatitis crónica o el cáncer de colon.
- Enfermedades endocrinas: como la diabetes mellitus tipo 1 o tipo 2, el hipotiroidismo o el hipertiroidismo.
- Enfermedades hematológicas: como la anemia aplásica, la leucemia, el linfoma o el mieloma múltiple.
- Enfermedades inmunológicas: como el VIH, el SIDA o las inmunodeficiencias primarias.
- Enfermedades oncológicas: como el cáncer de mama, el cáncer de próstata, el cáncer de pulmón o el cáncer de piel.
- Enfermedades oftalmológicas: como la ceguera total o parcial, el glaucoma, la retinosis pigmentaria o la degeneración macular asociada a la edad.
- Enfermedades auditivas: como la sordera total o parcial, el acúfeno, la otitis media crónica o la enfermedad de Ménière.
- Enfermedades dermatológicas: como la psoriasis, el eccema, la dermatitis atópica o la urticaria crónica.
- Enfermedades genéticas: como el síndrome de Down, el síndrome de Turner, el síndrome de Marfan o la distrofia muscular de Duchenne.
En resumen, la lista de enfermedades que dan derecho a la incapacidad permanente en el año 2023 en España incluye diversas enfermedades que pueden afectar a los trabajadores. Es importante que los trabajadores comprendan qué enfermedades se consideran incapacitantes y cómo esto puede afectar su vida laboral. Si un trabajador es declarado incapacitado, tendrá derecho a una pensión por incapacidad permanente y a recibir asistencia sanitaria gratuita.