Hay algo en lo que todos estamos de acuerdo: Definitivamente, una de las sensaciones más satisfactorias de la vida se centra en llegar a la comodidad del hogar tras un largo día de trabajo y quehaceres y vestir lo más suave y fresca que tengamos en el armario. Sin embargo, poco se habla de la frecuencia con la que se le debería dar una limpieza a fondo de las prendas de dormir antes de tirarla al cesto de la ropa sucia.
Si has llegado hasta aquí porque no recuerdas cuando fue la última vez que lavaste estas prendas y te preocupa la cantidad de células muertas, gérmenes, fluidos corporales, ácaros y mugre que se acumula en los tejidos ¡Sigue leyendo! Te contamos cada cuanto se debe lavar el pijama para prevenir infecciones e irritaciones en la piel (e incluso acné).
La frecuencia adecuada para lavar la ropa de dormir
Lo recomendado por especialistas en dermatología para evitar problemas cutáneos es realizar un lavado en lavadora o a mano al pasar tres o cuatro días, no obstante, se puede extender si tienes el hábito de ducharte antes de acostarte a dormir.
Por otro lado, el Instituto de Limpieza estadounidense (ACI, por sus siglas en inglés), indica que no debes usar la ropa con la que duermes por más de una semana, pues podría provocar proliferación de bacterias como el estafilococo, cistitis, tiña inguinal y otras infecciones. Es por este motivo que, además del lavado a tiempo, también aconsejan tener un par de pijamas y turnarlas entre toda la semana, igualmente, disponer de pijamas de diversos tejidos y grosor para que se adecúen a las épocas y climas cercanos.
Cómo lavar el pijama correctamente
Estas son las recomendaciones de los expertos para un óptimo lavado y desinfección de la ropa de dormir para prevenir la aparición de patógenos peligrosos e insectos como chinches:
Indiferentemente, realices el lavado la mano o a máquina lo ideal es lavar el pijama a 30º C para acabar con la suciedad, desprender los microorganismos y darle un trato más suave al tejido para cuidarlo del maltrato, pero lo idóneo para limpiar las telas a fondo y matar los gérmenes de raíz, es lavarla con agua muy caliente (60º C o más).
Ahora bien, si el tejido es delicado y no es apto para su lavado con agua caliente, es vital agregar algún producto con acción desinfectante que ayude a eliminar las bacterias peligrosas. Por ejemplo, lejía si es blanco o amoniaco si es de colores oscuros o más vivos.