«Lo único que deseo es un cuarto en alguna parte, lejos del aire frío de la noche. Con una silla enorme, chocolate y una estufa de leña” Audrey Hepburn.
Cuánta razón tenía mi querida Audrey; en el fondo no necesitamos tanto para ser felices. Nuestro hogar nos ofrece cobijo, la estufa calor y una buena silla el descanso que necesitamos.
En mi caso, debo de ser justa y otorgarle a las sillas todo el honor que muchas veces no les ofrecemos a y la importancia y el cuidado que se merecen. Estando más de una vez en viviendas de amigos y familiares he visto cómo sus sillas se encuentran en el lugar más apartado de la estancia, con el asiento sucio de manchas, el respaldo lleno de polvo, las patas todas arañadas… Para mí son un accesorio fundamental y totalmente necesario dentro de un hogar.
Me encanta comer en una silla sólida y alta; tomarme el café charlando con una amiga sentada en una de las sillas modernas para el comedor que tengo o leer en la habitación en mi silla clásica, con brazos y de piel color burdeos. Nuestros hogares sin las sillas no serían los mismos.
Sigamos hablando de las sillas y de lo bien que le sienta a la decoración de nuestras casas…
¿Qué tipo de sillas existen? ¿Dónde las coloco?
Como todos los muebles y accesorios que existen en el amplio mundo de la decoración, encontrarás multitud de tipos y modelos de sillas. Voy a mostraros las más habituales y en qué estancias y habitaciones las podemos ubicar.
Sillas para el comedor
Suelen ser las que más utilizamos en toda la casa ya que es donde habitualmente come la familia, por este motivo deben de ser sillas cómodas tanto en el asiento como en el respaldo, transpirables, que estén calzadas en las patas y que nunca lleven brazos. Ten en cuenta que el modelo que elijas tiene que ser armónico con el resto del comedor. El número de sillas no debe de superar el de 6 comensales.
Sillas para los dormitorios
Las sillas para estas estancias se utilizan sobre todo en el escritorio, para leer o como ayuda a la hora de vestirnos. Con respecto a las de escritorio, o también llamadas de estudio, tienen que ser ergonómicas, que pesen poco, podemos optar por los brazos para un mejor reposo de estos, llevan ruedas y su estilo suele ser moderno. Las de lectura, su característica principal es la comodidad, por encima del estilo o modelo que elijamos, suelen acompañarse de un pequeño puf para los pies. Son aconsejables las anchas de asiento y altas de respaldo para que puedan descansar tanto la espalda como nuestra cabeza. Por último, las sillas que empleamos para vestirnos sobre todo se utilizan para calzarnos y ponernos los calcetines o medias, por ello deben de ser bajas del asiento.
Sillas para la cocina
En una cocina las sillas pueden tener muchas utilidades y funciones, por ello lo primero que tenemos que saber es para qué las queremos. Si tenemos una cocina pequeña en la que no realizamos una vida doméstica, lo más lógico es tener una silla plegable, existen incluso con peldaños pequeños, que utilizaremos para llegar a los muebles y lugares más altos de la cocina. Si tenemos la suerte de tener una cocina amplia en la que dispongamos de un office, una isla o una pequeña barra, podemos optar por sillas de estilo comedor para comer o sillas altas para desayunar, tomar una taza de café o té, tanto en la isla como en la barra.
Sillas para el baño
El tipo de sillas que usaremos para el baño son muy similares a las utilizadas como ayuda de vestidor, ya que tendrán la misma función antes y después del baño o la ducha. A la hora de escoger nuestro modelo tendremos que tener en cuenta que el baño es una estancia en la que reina la humedad.
Sillas para la terraza
Deben de ser muy resistentes ya que se encontrarán en exterior y sufrirán todo tipo de inclemencias, las más aconsejables son las de plástico, madera o metacrilato. Aquí puedes liberar sin miedo tu imaginación a la hora de elegir formas y colores ya que siempre congeniarán con el estilo de tu terraza.
Según la habitación en la que queramos situar nuestras sillas, así deberá de ser el estilo de las sillas que elijamos. La variedad es muy amplia, desde las más clásicas hasta las más modernas, llegando a utilizarse todo tipo de telas, el mimbre, la piel, sillas con estructura de metal, sin olvidarnos de la madera e incluso el cristal o el metacrilato. También encontrarás en el mercado accesorios para las sillas como pueden ser los brazos o reposacabezas, ideales para los despachos; o multifuncionales como las abatibles para que nuestra espalda consiga un reposo ideal, pudiendo variar su altura para el descanso de las caderas y piernas.
Recuerda que las sillas han sido elementos de decoración que han tenido gran importancia dentro de la historia, han amueblado y decorado elegantemente desde casas humildes hasta verdaderos palacios. En cualquier lugar del mundo y en cualquier época de la historia han existido las sillas y en ellas se han sentado verdaderas reinas. ¡Y tú no vas a ser menos, claro está!
Un fuerte abrazo y nos vemos en mi próximo post.