Minimalismo, más que una forma de decorar en tendencia, un estilo que modifica los hábitos de vida de pie a cabeza. Su objetivo esencial es comprender que no siempre más, es mejor, en especial cuando se trata de limpieza y organización del hogar. Es decir, que tener demasiadas cosas no es sinónimo de ser feliz y, por el contrario, son contraproducentes para la salud y el bienestar. Ahora bien, ¿cuáles son los primeros pasos para aplicar esta propuesta en casa?
Si bien existen muchas formas de reducir el desorden (en el hogar y en la mente), ser plenamente consciente de lo que se tiene, lo que se necesita y lo que realmente se utiliza. Si quieres llegar a ese punto de sabiduría, ¡lee con atención! En este artículo te contamos de qué va la limpieza y orden minimalista y como ponerlo en práctica para vivir mejor.
Estilo minimalista: 5 consejos para aplicarlo en el hogar y evitar el caos
Si bien en un principio cuesta un poco adaptar esta visión de la vida a las tareas domésticas del día a día (en especial con tantos cambios tecnológicos en los últimos años), no es imposible. La clave es combatir las principales distracciones, definir las necesidades mínimas, priorizar lo realmente valioso, evitar el consumismo y prestar atención a los consejos —los adecuados—. Estos son algunos de ellos:
- Reduce y aligera: No está mal tener diversos objetos en casa, siempre y cuando nos acompañen con un objetivo, que sean útiles o que realmente nos ayuden en algún aspecto de la vida. El error que nos aleja del minimalismo es acumular cosas que, sin darnos cuenta, nos hacen renunciar a la libertad mental.
No se trata de botar todos los cuadros o los adornos (mucho menos si tienen un verdadero valor sentimental) sino de conservar lo que te hace feliz, lo que facilita tus rutinas y te permite ahorrar tiempo durante de la limpieza. El secreto es este: reflexiona sobre lo que tienes a tu alrededor, vende o dona lo que en vez de gustarte, te estresa, y deposita la importancia en la calidad, más que cantidad. ¡No lo pienses mucho!
- Limpia el armario con la técnica 3-33: Este famoso proyecto con más de 14 años de trayectoria fue promovido por el blog “BeMoreWithLess” y explica que es más que suficiente contar con 33 prendas de vestir y accesorios durante tres meses (de ahí su nombre) para vestir bien y con todo lo necesario. No obstante, no tienes que seguir al pie de la letra esta técnica, basta con desechar lo que estés seguro/a que no usarás nuevamente, lo que no te quede o lo que esté roto.
- Organiza como Marie Kondo: La reina del orden mundial aconseja clasificar y almacenar los objetos de acuerdo a su uso. Hazte amigo/a de las cajas, contenedores y organizadores y colócales etiquetas para dar rápidamente con cualquier cosa que busques.
- Dobla la ropa efectivamente: Además de mantener el armario y los cajones en orden, se recomienda apilar la ropa en general de forma vertical en las baldas o en los cajones, de esta manera, podrás encontrar las prendas sin desordenarlas ni arrugarlas.
- Evita el consumismo: Una vez hayas desechado lo innecesario y organizado tu hogar, la clave para continuar con el minimalismo es comprar menos. Antes de pagar por algo pregúntate: ¿Lo necesito en verdad?, ¿me hará feliz?, ¿puedo comprarlo otro día?, ¿lo compraría si no estuviera en oferta o de rebajas? Si ninguna de estas respuestas te convence, ¡entonces no lo compres!
Estas técnicas no solo ayudan a mantener la casa en óptimas condiciones, sino que son estupendas para invertir de manera más inteligente el tiempo y el dinero, mejorar tu bienestar mental, sentirte mejor en lo personal e incluso dedicarte a otras actividades de valor. ¡Es un ganar-ganar!