Como suele ser habitual año tras año, hubo muchas sorpresas a lo largo de la semana de la moda de Nueva York. Las propuestas más revolucionarias e inesperadas de algunas marcas o Leiva desfilando arriba de una pasarela, fueron algunas de las que marcaron la semana en la ciudad neoyorquina aunque sin duda, el mayor asombro llegó durante la puesta de largo de Fendi en la ciudad americana.
No había nadie que pudiese preveer lo que sucedió arriba de la pasarela y es que, la marca consiguió rescatar más de una década después a un icono de la moda de los 90 que por fin, volvía a sentir la seguridad necesaria como para exponerse al público. Linda Evangelista reaparecía una década después de haber tomado la decisión de desvincularse del mundo de la moda por una operación estética que desfiguró su rostro.
Fue una época demasiado complicada para la modelo, que incluso llegó a reconocer en septiembre de 2021 que no soportaba mirarse al espejo para ser testigo de un rostro en el que no se reconocía. La belleza se había esfumado de un plumazo pero con el paso del tiempo, afortunadamente decidió dar un nuevo rumbo a su vida después de ver cómo la Hiperplasia Adiposa Paradójica (HAP) le obligó a lidiar con bultos de masa en su rostro, lo que también le afectó psicológicamente.
Sin embargo, fue en la época estival de este 2022 cuando decidió dejar atrás el tratamiento CoolSculpting de Zeltiq, que en su caso hizo lo contrario de lo que prometía, para comunicar que a sus 57 años comenzaba un nuevo capítulo en su vida en el que volvía a la esfera pública y también, al trabajo que tantas portadas le dio durante los años anteriores.
Fendi acudió al rescate
La modelo canadiense dio a conocer la decisión de su reaparición después de que Fendi contase con ella para volver al trabajo. La firma de moda italiana apostó de nuevo por Evangelista y al mismo tiempo que la convirtió en una de las imágenes de la marca, también consiguió dar la sorpresa en unas pasarelas, a las que llevó de nuevo a la modelo durante la semana de la moda de Nueva York.
Después de haber recibido en un primer momento una oleada de apoyo que llegó tanto por parte de sus fans como de sus compañeras de industria (como Naomi Campbell, Amber Valetta o Cindy Crawford entre otras) cuando contó su historia, cuando subió a la pasarela la reacción no fue menos emotiva que la que experimentó por aquel entonces.
Emoción y devoción se vivieron durante una larga ovación dedicada única y exclusivamente la modelo de 57 años, durante un desfile en el que también estuvo arropada por Marc Jacobs. La reaparición de Linda Evangelista captó sin duda todas las miradas y es que la ovación que recibió, fue digna de recordar ya que la canadiense tuvo la oportunidad de comprobar de primera mano, cómo el mundo de la moda no se ha olvidado de ella.
Porque alguien que consiguió ganarse el corazón del mundo de la moda durante los años 90, en esa época de transición entre el anonimato y la fama, siempre tuvo un hueco especial dentro de la industria. Algo que también le permitió convertirse en la protagonista absoluta del desfile de Fendi durante la semana de la moda de Nueva York, en lo que además fue un desfile todavía más emotivo para la firma ya que celebraba el 25 aniversario de su bolso más mítico: el baguette. Una reaparición soñada a la que Evangelista se rindió con esa ovación que aceptó con los brazos abiertos.
La ocasión perfecta
Todo salió a pedir de boca durante un acto en el que hubo doble celebración. Sobre el escenario, Marc Jacobs (que ha sido uno de los colaboradores más importantes en el restyling del Baguette), Silvia Fendi y Kim Jones, director creativo de la firma italiana, quisieron arropar a la modelo en ese regreso que se vivió entre aplausos, con Linda vestida con un precioso abrigo azul ‘Tiffany’ con manga abullonada, junto al que volvió a saborear la sensación de caminar por la pasarela.
El infierno que vivió la canadiense en la última década pasaba a la historia de manera inmediata. Para ese momento inolvidable, la top model cambió las gorras superpuestas en color rosa, las gafas de sol y la capelina con la que se convirtió en la imagen de la campaña, por esa espectacular capa que también exhibía la baguette de plata esterlina maciza hecha a mano a juego con los guantes de satén.
Fue sin duda todo un espectáculo para los amantes de la moda, del que afortunadamente pudieron disfrutar en primera fila algunos de los rostros más conocidos como el de Sarah Jessica Parker, Kim Kardashian, Natalia Dyer o Winnie Harlow. Y al mismo tiempo supuso el regreso de un icono que parece haber llegado para quedarse. Si es que alguna vez se fue…