Piensa por un minuto y responde con sinceridad esta pregunta: ¿Cada cuánto realizas una limpieza profunda al colchón y las almohadas de tu hogar? Si ni siquiera recuerdas cuándo fue la última vez que lo hiciste, ¡te tenemos graves noticias! Si no se limpian con frecuencia, en el tejido de estos objetos habitan y se reproducen una gran cantidad de microorganismos y hongos nocivos para la salud.
Aunado a lo anterior, no solo se acumulan bacterias y ácaros, sino también mucha suciedad, células muertas, humedad y fluidos corporales, lo cual, a mediano y largo plazo, genera manchas y mal olor. Si no quieres que esto suceda, sigue leyendo y entérate del truco de los hoteles para limpiar los colchones y almohadas y dejarlos impecables.
Cómo limpiar el colchón y las almohadas y hacerlos lucir impolutos
Es cierto, la limpieza del colchón y las almohadas se descuida mucho, en especial cuando se está corto de tiempo tras cada cambio de estación. Sin embargo, es crucial higienizarlos a fondo para prevenir reacciones alérgicas, enfermedades en la piel y manchas amarillas por el sudor, saliva y mugre. Sigue estos pasos y devuélveles el color original:
- Antes que nada, retira la ropa de cama y lávala. Si son blancas y se han amarilleado, una buena técnica es dejándola en remojo por una hora con un poco de agua muy caliente, un chorro de oxígeno activo (o simplemente agua oxigenada al 35%) y un poco de detergente para lavar ropa. Pasado este tiempo, lava en la lavadora como de costumbre. ¡Relucirán!
- Hecho lo anterior, espolvorea bicarbonato de sodio en toda la superficie del colchón y deja que actúe por 2 a 3 horas y pasado este tiempo recoge el polvo con el aspirador. Esto servirá para desaparecer humedad y olores molestos.
- El siguiente paso, si quieres blanquear el tejido del colchón y eliminar cualquier rastro de mugre, mezcla media taza de agua oxigenada de 20 a 30 volúmenes con un poco de jabón líquido, aplica con ayuda de una esponja o cepillo en las zonas más manchadas, deja actuar durante 30 minutos y finalmente retira con un paño ligeramente humedecido con agua tibia para no mojarlo demasiado.
- En el caso de las almohadas, el procedimiento es similar. Debes aspirar para remover los ácaros y el polvo superficial. Luego, trata con agua oxigenada las manchas y lava en la lavadora con jabón, media taza de bicarbonato y una taza de vinagre blanco. Selecciona un ciclo de lavado largo, con agua tibia y centrifugado suave (si introduces un par de pelotas de tenis no se apelmazan).
Recordatorio: Cada seis meses dale vuelta y gira el colchón para preservar su forma. Es decir, donde iba la cabeza, que ahora vayan los pies, y lo que estaba sobre la cama, que ahora quede en contacto con el cuerpo.
Ten presente que una cama sucia no solo apesta y afecta la calidad del sueño, sino que también se convierte en nido de gérmenes y un foco de alergias e infecciones. Mantener limpia esta zona de casa no es cuestión de elección ¡Es una obligación!