La mayoría de los españoles tienen una vivienda como principal activo, de acuerdo a un estudio de Fotocasa Research. Muchos han preferido invertir en una vivienda que ahorrar dinero en otros sitios para complementar la pensión cuando se jubilen. Por esto, cada vez más son más las personas que se preguntan si pueden usar su vivienda para ganar más dinero y vivir mejor durante su jubilación.
Lo cierto es que existen distintas maneras de generar rentabilidad con tu vivienda sin que dejes de ser el dueño o dejes de vivir en ella y así recibir un mayor ingreso al de tu pensión. Algunas de las formas incluyen vender la casa y mudarte, vender la vivienda y seguir viviendo en ella, hacer un acuerdo con alguien que te pague una renta por tu casa o pedir un préstamo con tu casa como garantía, es decir, hipotecarla. En este artículo te contamos cómo son estas opciones y cuál es la más conveniente.
Opciones para usar tu vivienda como un complemento a tu pensión
Si no te importa vivir en otro sitio o compartir tu vivienda con otras personas, puedes optar por vender tu vivienda y obtener un capital o una renta que complemente tu pensión. Existen diferentes modalidades para hacerlo, como vender y mudarte, vender y quedarte u optar planes de reversión de vivienda. A continuación, te explicamos más sobre ellas.
- Vender y mudarte: Consiste en vender tu casa y mudarte a otra más asequible o alquilar en otro lugar. En esta opción, el dinero que ganas por vender tu casa es el que puedes usar como complemento a tu pensión y la ventaja es que puedes escoger dónde vivir y gastar el dinero como quieras.
- Vender y quedarte: Consiste en vender tu casa a una empresa o banco que te deja seguir viviendo en ella como si fueras un inquilino, pagando una renta cada mes o para siempre. De nuevo, el capital que obtienes por la venta lo puedes usar como complemento a tu pensión. La ventaja de esta opción es que no tienes que cambiar de casa.
- Planes de reinversión de vivienda: Esta opción se trata de vender tu casa a alguien a cambio de una renta que puede ser temporal o vitalicia, sin embargo no pierdes el derecho a vivir en ella. Lo bueno de esto es que no tienes que cambiar de casa ni pagar un alquiler por ella.
La hipoteca como opción para usar tu vivienda como complemento a tu pensión
Si quieres conservar la propiedad y el uso de tu vivienda, pero necesitas liquidez para mejorar tu pensión, puedes optar por hipotecar tu vivienda y obtener un préstamo o una renta que devolverás al finalizar el contrato o al fallecer. Para hipotecar tienes dos opciones:
- Hipoteca inversa: En esta opción puedes pedir dinero a un banco usando tu casa como garantía, el cual puedes cobrar de una vez, cada mes o cada cierto tiempo. Si haces esto, no será necesario que pagues el dinero ni los intereses hasta que mueras o vendas la casa, entonces el banco se quedará con la casa o la venderá para cobrar lo que le debes. Lo bueno de esto es que puedes seguir viviendo en tu casa y ser el dueño y dejarla a tus hijos, si ellos pagan lo que debes.
- Hipoteca inversa asegurada: Es igual que la hipoteca inversa, pero además con esta hipoteca contratas un seguro que te paga una renta extra hasta que fallezcas. La ventaja de esta opción radica en que puedes seguir viviendo en tu casa y ser el dueño, así como tener el derecho de dejarla a tus hijos, si ellos pagan la deuda, y que además recibirás una renta fija por el seguro.
Como has visto, la vivienda es un activo que puedes usar como complemento a tu pensión durante tu jubilación, pues con ella podrás obtener un dinero o una renta que mejorará tus ingresos. Tienes diferentes opciones para movilizar el patrimonio inmobiliario, según desees conservar o no la propiedad y el uso de la vivienda. Te recomendamos que analices cada caso con detenimiento y te asesores bien antes de tomar una decisión.